El herpes zóster también conocido como culebrilla es una infección viral, dada por el virus conocido como herpes virus apareciendo como herpes ampollas en todo el cuerpo pero que inicia en el tórax siguiendo la línea intercostal y que va produciendo mucho dolor en todo el tiempo en que las lesiones van evolucionando.
No obstante, este tipo de herpes al ser muy doloroso hace que quienes lo padezcan, para el momento requieran buscar no solo el tratamiento médico, sino también remedios naturales que disminuyan su agresividad, el dolor y con ello que se acorte la duración de todo el período natural de la culebrilla.
Una magnifica opción natural que tienes para recalcar su máximo funcionamiento al querer curar el herpes, es la moringa que con un sinfín de propiedades cuenta con la satisfacción de minimizar los síntomas del herpes y va aportando buenos resultados en todas sus presentaciones.
La recuperación es casi inmediata, pues es una planta con propiedades restauradoras de la piel, así como también de las mucosas, lo que permite que la utilización sea completa basada en efectos provechosos para la recuperación de las ampollas y con ello, la prevención incluso de futuros brotes ya sea como herpes genital u oral.
Al presentar culebrilla, lo primero que se identifica es el dolor tipo quemante en el área de las costillas, pues será donde en los próximos días saldrán las lesiones ampollares características del herpes virus e igualmente, la comezón será tal que de cualquier forma debe tratar de aliviarse y es donde se procederá a hacer el remedio con la planta efectiva de la moringa.
La moringa dentro de sus efectos va incluyendo la prevención de las lesiones, la suavidad de los síntomas disminuyéndolos progresivamente, así como también hacer que la duración sea lo más corta posible, tratando de que sea un episodio no tan molesto.
Remedio para la culebrilla con moringa
- Para iniciar la preparación, te recomendamos tener moringa para cada día, pues es un remedio que debes seguir por lo menos durante 5 días.
- En una cazuela coloca a hervir 1 taza de agua, en la que colocarás a su vez 4 ramas de moringa, esperando el primer hervor para apagarlo y dejar reposar durante 20 minutos, de forma que se extraiga la mayor cantidad posible de su savia y de sus beneficios en el agua.
- Retira las ramas de la moringa y procede a remojar una compresa en la taza con el agua ya preparada donde se encuentra la moringa, dejando que se llene completamente.
- Aplica en las zonas donde se encuentran las lesiones dejando las compresas por 5 minutos en cada zona, el alivio será inmediato e irá purificando las herpes ampollas, de forma que puedan quedar a la intemperie rápido y bajo cuidados eficientes de la piel, todo con las propiedades y cualidades internas de la moringa.
- Con constancia y dedicación los beneficios se obtendrán rápidamente además de dar una percepción refrescante en toda la piel afectada por el virus.